El cuento de nunca acabar en Madagascar: Los tres truhanes

La Corte Electoral Especial de Madagascar ha decidido mantener la candidatura de un trío ruinoso para la vida política del país, el trío calavera: Rajoelina, Ravalomanana y Ratsiraka. Me explico.

Allá por 2009, el joven disjockey Andry Rajoelina, como alcalde de la capital de Madagascar, Antananarivo, se convirtió en el abanderado de las protestas callejeras por los excesos y corruptelas del entonces presidente, Marc Ravalomanana, al que logró derrocar sin golpe de estado propiamente dicho, porque obtuvo el apoyo del ejército, que con su mera presencia, hizo que el multimillonario presidente pusiera pies en polvorosa. Marc Ravalomanana había creado un imperio de productos lácteos y agrarios, gracias a la “cooperación” de ONG y donantes internacionales, incluso obtuvo un crédito de un millón y medio de dólares bajo muy buenas condiciones ¡del Banco Mundial! Lo cual le permitió llevar su empresa Tiko a lo más alto. Después también se metió en otros negocios lucrativos como las fábricas de ropa (estilo Bangladesh) y la recogida de ropa de segunda mano.

Rajoelina se quedó como presidente con muchos inconvenientes que salvar, sobre todo por su juventud e inexperiencia, pero con el apoyo del ejército. Ravalomanana, siendo tan rico, tampoco andaba falto de apoyos, y fue visitando a los todos los presidentes de la región del sur de África, para obtener su apoyo contra Rajoelina.

Los líderes de la región, llamada SADC (Sudáfrica, Namibia, Botsuana, Zimbabue, Mozambique, Lesoto, Zambia, Malaui, Mauricio, Seychelles, Tanzania, Angola, Suazilandia, República Democrática del Congo y Madagascar) declararon presidente ilegítimo al joven Rajoelina, y exigieron que se celebrasen nuevas elecciones.

 A estas nuevas elecciones se presentarían principalmente Rajoelina el “golpista” y Ravalomanana “el depuesto” por protestas populares.

¡JA! pensó un hombre que se llama Didier Ratsiraka, y alzó la voz para denunciar lo siguiente:

“Si Rajoelina no es legítimo porque depuso a Ravalomanana. Éste, tampoco era legítimo por haberme depuesto a mí casi de la misma manera”.

Ravalomanana era un joven alcalde de la capital en 1999, cuando se puso al frente de múltiples protestas populares contra el presidente Ratsiraka, ¡los dos llegaron a considerarse presidentes durante unos días y todo!, hasta que con la ayuda de los militares Marc ganó la partida, le depuso, y Ratsiraka tuvo que huir a las Seychelles.

A estas alegaciones, los líderes de la región respondieron a Ratsiraka “vaaaaaaaaale, pues venga, tú también puedes presentarte”.

 

A la gente en Madagascar se le quedó la cara de “ehing!?”. Es como un PP-PSOE, pero de tres patas, para que nos entendamos los españoles.

Y así llevan 4 años mareando la perdiz, con negociaciones rotas una y otra vez, compromisos firmados e incumplidos… Rajoelina no estaba dispuesto a ceder la presidencia, pero ante la amenaza del ejército de “cuidado chaval que nos tienes hartos y vamos a dejar de protegerte”, anunció que aceptaba no presentarse a las presidenciales, si Ravalomanana, el hombre al que depuso, tampoco se presentaba.

Ravalomanana estuvo de acuerdo con esta condición, y se abrió el plazo de inscripción de candidaturas a la presidencia.

Pero cómo son los políticos, nunca dejan de sorprender con nuevas argucias y ese descaro difícil de alcanzar por los mortales normales. Un buen día, presentó su candidatura para la presidencia una tal……… ¡Lalao Ravalomanana!, la mujer del magnate de los agrobusiness y las fábricas de ropa.

Rajoelina se enfurruscó y dijo, “¡hala, pues yo también me presento!”. Y Ratsiraka dijo, “¡Hala! ¡Míra qué listos! ¡Pues yo también me presento!”.

Y así, entre resoplidos de aburrimiento, se formó un consejo entre los militares, políticos de buena fe, que habeilos haylos y al parecer tienen mucha paciencia, y grupos organizados de la sociedad civil, para deliberar. Pidieron a un tribunal especial Electoral que obligase a retirar la candidatura a estos tres sinvergüenzas.

¡Qué presiones y sobornos no habrá habido por detrás, que el tribunal viajó a La Haya para la deliberación, en lugar de reunirse en su sede de Madagascar!

Hoy, día 5 de junio, ha decidido dos cosas:

-admitir las tres candidaturas.

-que no se pueda apelar esta decisión.

Colorín colorado, este cuento ¿se habrá acabado?